Si acabas de descubrir que tu hijo tiene una carie, es normal que te sientas un poco culpable, preocupado o, directamente, en pánico. Te preguntas: «¿Ahora qué hacemos? ¿Le va a doler? ¿Tendrán que dormirlo?»
Calma. Es el momento de respirar y buscar la mejor solución.
La caries es la enfermedad crónica más común en la infancia, pero hoy en día, gracias a la odontopediatría, tenemos formas muy amables y efectivas de tratarla, sin traumas y sin dolor. El objetivo de un odontopediatra no es solo arreglar el agujero, sino también transformar la experiencia para que tu hijo no desarrolle el temido miedo al dentista.
Te explicamos paso a paso cómo se arreglan las caries en niños, qué opciones de tratamiento existen y, lo más importante, qué hacer si tu hijo tiene caries para que la visita sea un éxito en MM Sonrisas Infantil.
Muchos padres, erróneamente, piensan: «Es un diente de leche, se caerá solo». Este es el error más grande que se puede cometer, ya que las caries en dientes de leche tienen consecuencias serias.
Dolor e Infección: Una carie profunda puede causar un absceso (infección) que genera dolor insoportable, hinchazón de la cara y fiebre.
Problemas de Nutrición y Lenguaje: El dolor dificulta que el niño mastique correctamente, afectando su alimentación. Si la carie está en un diente frontal, puede afectar la forma en que el niño habla.
Daño al Diente Permanente: La infección en la raíz del diente de leche puede afectar al germen del diente permanente que está justo debajo, causando manchas, debilidad o problemas de erupción.
Pérdida Prematura: Si hay que extraer un diente antes de tiempo, se necesita un mantenedor de espacio (como ya explicamos en nuestro artículo de odontopediatría), lo que implica más citas y más coste que un simple empaste a tiempo.
El dolor de una carie suele ser el primer aviso real para muchos padres. Es importante saber cómo calmar el dolor de caries en niños mientras esperas la cita con el odontopediatra.
Higiene Inmediata: Cepilla suavemente la zona para eliminar restos de comida que puedan estar presionando o irritando.
Frío Local: Aplica frío (una bolsa de hielo envuelta en un paño) sobre la mejilla, justo en la zona del dolor. Esto desinflama y adormece temporalmente.
Analgésicos: Administra el analgésico que uses habitualmente con tu hijo (Ibuprofeno o Paracetamol), siempre siguiendo la dosis indicada por el pediatra según su peso y edad. Nunca coloques la pastilla directamente sobre el diente o encía, ni uses remedios agresivos.
Importante: Estos son solo parches. El analgésico solo enmascara el problema. Debes llamar a la clínica para una cita de urgencia en cuanto el niño sienta dolor.
El tratamiento se decide según la profundidad de la carie y la edad del niño.
¿Cómo empasta un dentista la caries de un niño? El proceso es muy similar al del adulto, pero adaptado a su psicología:
Eliminación de la Caries: Con una fresa muy pequeña (el «cepillo mágico» en nuestro lenguaje), se limpia la zona dañada.
Relleno: Se utiliza un material de resina compuesta (empaste) del color del diente para rellenar la cavidad.
Si la carie llega al nervio del diente de leche, se realiza una pulpotomía (un tratamiento en la pulpa) para salvar la pieza. Luego, en lugar de un empaste tradicional, a menudo se coloca una corona preformada (de acero o zirconio, más estéticas).
¿Por qué la Corona? En dientes muy dañados, la corona funciona como un «casco» que protege el diente de romperse hasta que llegue la hora de que erupcione el diente definitivo.
En odontología pediátrica moderna, para caries muy iniciales o en niños muy pequeños que no colaboran, a veces se puede utilizar el Diamino Fluoruro de Plata (SDF). Esto «detiene» la carie y evita que avance, sin necesidad de usar fresa.
La ansiedad que tienen los padres sobre el pinchazo es a menudo mayor que la del propio niño. Es vital saber qué anestesia le ponen a los niños en el dentista para transmitir calma.
El Paso Previo: Antes de la anestesia inyectable, siempre se aplica una crema o gel tópico (con sabor a fruta, en MM Sonrisas Infantil) que adormece la encía. Así, el niño casi no siente el pinchazo, que se realiza con una aguja muy fina y con mucha lentitud.
La Conversación: La clave es la distracción. El odontopediatra experto habla con el niño de su serie favorita o de sus vacaciones mientras aplica la anestesia.
La sedación se reserva para niños que necesitan muchos tratamientos en una sola cita o aquellos que tienen un miedo extremo (ansiedad dental incontrolable) o necesidades especiales.
Óxido Nitroso (Gas de la Risa): Es la forma de sedación más común. El niño respira una mezcla de gas y oxígeno por una pequeña mascarilla. Permanece consciente, pero entra en un estado de relajación profunda, sin miedo ni ansiedad. Es muy seguro, se elimina rápidamente del cuerpo y permite que el tratamiento se realice de forma tranquila.
Sedación Profunda: Se reserva para casos muy complejos y se realiza siempre con un anestesista.
Muchos buscan en internet formas naturales de curar las caries, como aceites o dietas específicas, con la esperanza de evitar el tratamiento dental.
La Realidad: Una vez que la carie ha roto el esmalte y ha creado una cavidad (un agujero), no hay vuelta atrás. Ningún remedio casero, aceite o dieta puede hacer que el esmalte se regenere y tape el agujero. Solo el dentista puede limpiar y sellar la lesión para evitar que la bacteria siga avanzando.
Prevención, Sí; Curación Natural, No: Los cambios de dieta y el uso de flúor de alta calidad previenen las caries iniciales (descalcificación), pero no curan el daño ya hecho.
El diagnóstico de caries es solo el comienzo. La verdadera solución es un plan de tratamiento ejecutado por un equipo experto en odontopediatría y, sobre todo, un plan de prevención para que no vuelva a suceder.
En MM Sonrisas Infantil, no solo ofrecemos las técnicas de tratamiento más avanzadas (empastes, coronas, sedación), sino también la experiencia y la paciencia necesarias para que tu hijo:
Se sienta seguro y escuchado.
Nunca sienta dolor durante el tratamiento.
Salga de la consulta con una sonrisa y sin traumas.
¿Qué debo hacer si mi hijo tiene caries? Llámanos. No busques más soluciones en internet que solo te generarán más dudas. Permítenos evaluar el caso y ofrecerte el mejor camino, adaptado a su edad y personalidad.
Contacta con nuestra clínica hoy mismo. Estamos listos para cuidar la sonrisa de tu hijo.
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